Es habitual relacionar en muchas ocasiones un newsletter con un correo SPAM. Se llama SPAM, correo basura o mensaje basura a los mensajes no solicitados, no deseados o de remitente no conocido (correo anónimo), habitualmente de tipo publicitario, generalmente enviados en grandes cantidades (incluso masivas) que perjudican de alguna o varias maneras al receptor.

Es fundamental entender que una campaña de email marketing debe dirigirse exclusivamente a personas que han mostrado interés previo en recibir esa información. Por ejemplo, si recibes promociones de una tienda de bolsos, es porque te suscribiste voluntariamente a su boletín. En cambio, si recibes mensajes publicitarios sin haber dado tu consentimiento, eso se considera correo no deseado o spam. Por ello, es clave contar con una plan de reputación digital que garantice que tus envíos sean bien recibidos y no sean percibidos como intrusivos o no autorizados.

Hay muchas más diferencias entre SPAM e Email Marketing, ambos conceptos se pueden apreciar en esta infografía facilitada por Milca Peguero.

infografia_spam_vs_email_marketing