No hay duda. Si por algo se ha caracterizado siempre es Twitter, es por ser la red social de los 140 caracteres. La red social de la brevedad y la concisión, que ya suma unos 328 millones de usuarios, supuso una nueva herramienta y un nuevo código de comunicación en nuestra sociedad.

Sin embargo, el pasado 26 de septiembre se sirvió la polémica con el anuncio de que la red social permitirá 280 caracteres. El CEO de Twitter Jack Dorsey ha defendido esta medida tuiteando, como no podía ser de otra manera, y afirmando que es “la solución de un problema real que los usuarios tienen al intentar escribir un tuit”. Dorsey, asegura en su tuit que los 140 caracteres fueron una elección arbitraria basada en el límite de los SMS de 160 caracteres.

La razón que Aliza Rosen‎ y ‎Ikuhiro Ihara‎ (responsable de producto e ingeniero de software de Twitter) defienden, basándose en un estudio realizado por la propia compañía, es que hay idiomas en los que los 140 caracteres se quedan muy cortos para expresarse, como el español, el inglés o el portugués. Además, aseguran que hay más frustración entre los tuiteros que siempre topan con el límite y que los usuarios que no tienen estos problemas escriben con más frecuencia.

Asimismo, ante las posibles críticas de que la red social perdería su esencia permitiendo textos más extensos, se adelantaron asegurando que “los tuits recogen de manera concisa la información o los pensamientos que importan. Y eso es algo que nunca va a cambiar”.

En cierto sentido puede que sea cierto que para algunos usuarios 140 caracteres se queden cortos, y se puede comprobar en una nueva forma de expresarse que los usuarios han encontrado dentro de Twitter con los ‘hilos’, en los que el usuario se responde a un tuit con otro tuit y genera una cadena que le permite publicar textos más largos.

Pero no todo el mundo ha acogido la noticia con aceptación y agrado. Muchos han asegurado que la solvencia de la compañía está pasando por momentos difíciles debido al estancamiento de la red social, y aseguran que esto puede ser una estrategia publicitaria, ya que el hecho de disponer de más espacio para expresarse supondrá un mayor tiempo de permanencia dentro de la página.

De momento, Twitter solo permite a un grupo de personas el uso de esta nueva función a usuarios de diferentes partes del mundo, a excepción de los que se expresan en japonés, chino y coreano ya que para ellos, según afirma la compañía del pajarito, 140 caracteres siguen siendo demasiados.